Transcribimos una nota que Marcos Guglielmetti (desarrollador de Musix, distribución de software libre multimedia) escribió en Master Magazine.

RedPanal.com por medio de Mariana Baraj invita a participar de un evento un tanto extraño en su clase: el Primer Concurso de Música Colaborativa organizado por el mismo sitio web.

Este portal de Internet ha levantado su castillo en las nubes del cielo de la cultura libre, aquella que subsiste entre ondas electromagnéticas en el aire que todos respiramos, entre cables transoceánicos, fibra óptica, circuitos y satélites. En un sitio tan maravilloso y virtual, sostenido por la tecnología de la comunicación y la información, los músicos se dan cita y se igualan. No hay fronteras, más que aquellas económicas y las que tienen que ver con el conocimiento y habilidades de cada uno.

La llamada cultura libre se basa en la idea de que el arte debe ser compartido para poder existir. En verdad, la industria tecnológica del siglo XX nos trajo hasta aquí, destruyó en los hechos el poder de las grandes editoriales culturales, logrando que niños y niñas puedan realizar una mejor tarea a la hora de compartir cultura (mediante Ares, eMule, Bittorrent, Wikipedia, etc.) de lo que lo haría una gran empresa.

El potencial creativo está, entonces, también en la red, en los contactos informáticos, en los pensamientos y sentimientos compartidos a distancia o cerca nuestro, con la voz de boca a oído, con la cuerda de la guitarra vibrando en el aire directo hacia nosotros, o mediante redes informáticas. Sea como fuere, cada uno va escuchando su propio pensamiento y el de otro que quizá jamás hubiera llegado a conocer.

A partir del material en texto y audio disponible en RedPanal se convoca a este evento que formará parte del próximo “Encuentro: Cultura Libre y Música Colaborativa“, el 30 de agosto de el Centro Cultural de España, Buenos Aires, Argentina.

Las bases y condiciones se encuentran en el sitio web, ya mismo podemos comenzar a participar.

Personalmente recomiendo el software libre Ardour y Rosegarden para crear música, dado que utilizar software privativo para crear cultura libre es completamente contradictorio con las formas y los ideales de lo que se intenta construir.

Si no podemos estudiar, compartir, modificar y mejorar el software ¿qué sentido tiene la cultura libre que es un derivado del movimiento del software libre?

Mariana Baraj

Deja una respuesta